comentario – El Salmo 138 se presenta como una canción de agradecimiento a Dios, por el salmista, por haber usado la misericordia hacia él, escuchando su oración. Él desea alabar al Señor y se niega a unirse a ningún ídolo, porque quiere cantar exclusivamente para Él. La respuesta de Dios no tardó en llegar y lo hizo más fuerte frente a todos sus oponentes.
Salmo 138 completo
[1] De David. Te agradezco, Señor, con todo mi corazón: has escuchado las palabras de mi boca. Quiero cantarte ante los ángeles
[2] Me inclino ante tu santo templo. Doy gracias a tu nombre por tu lealtad y tu misericordia: has hecho tu promesa más grande que cualquier fama.
[3] El día que te invoqué, respondiste, aumentaste mi fuerza.
[4] Todos los reyes de la tierra te alabarán, Señor, cuando escuchen las palabras de tu boca.
[5] Los caminos del Señor cantarán, porque la gloria del Señor es grande;
[6] el Señor es exaltado y mira hacia los humildes pero mira a los orgullosos desde lejos.
[7] Si camino en medio de la desgracia me das vida; extiende tu mano contra la ira de mis enemigos y tu mano derecha me salva.
[8] El Señor completará su obra por mí. Señor, tu bondad dura para siempre: no abandones el trabajo de tus manos.